Sindrome de Horner — Causas, síntomas y tratamiento

Existen diferentes tipos de patologías que pueden afectar a un individuo en diferentes aspectos, como por ejemplo en los nervios de alguna parte del cuerpo en específico; tal es el caso del síndrome de Horner, del cual explicaremos toda la información que se ha recopilado hasta los momentos.

¿Qué es el síndrome de Horner?

Este síndrome es una extraña patología o trastorno que afectan los nervios de la cara y los ojos; dando como resultado una serie de síntomas como párpados caídos. También es conocido con el nombre de síndrome Claude Bernard Horner debido a la historia de su descubrimiento.

El principal investigador del trastorno fue Claude Bernaard, un fisiólogo de Francia que observó animales con dicha afección en el siglo XIX. Más tarde, el oftalmólogo Horner la descubrió por primera vez en humanos, siendo la paciente una mujer que rondaba los 40 años de edad.

El síndrome de Horner afecta una vía simpática, la cual puede dividirse en tres tipos: central, preganglionar y postglangionar. Sin embargo, la afección puede varias según el individuo.

¿Cuáles son las causas del síndrome de Claude Benard Horner?

Se puede decir que existen dos causantes del síndrome. El primero se refiere a cuando se origina sin necesidad de trastornos externos; mientras que el segundo sería como resultado de otro trastorno.

  1. A) Cuando la patología se origina por sí misma, ocurre cuando las fibras nerviosas resultan afectadas en algún punto de su conexión entre el cerebro y el ojo. Algunas de ellas realizan un largo recorrido, que va desde el cerebro, pasando por la médula espinal, tórax, cuello, cráneo y finalmente los ojos.
  2. B) Si se trata del origen debido a otro trastorno, existen varias afecciones que pueden ser las causantes. Además, estas patologías suelen afectar alguna de las zonas descritas anteriormente por las que pasan las fibras nerviosas.

Entre los trastornos más frecuentes que suelen causar el síndrome de Horner, podemos encontrar:

  • Espondilosis cervical.
  • La enfermedad de Lyme puede ser una de las causantes, siendo posible revertir los efectos.
  • Tumores que puedan afectar la base del cráneo y el tumor de Pancoast, el cual se encuentran en la parte superior del pulmón.
  • Lesión en los nervios plexo braquial o de la carótida.
  • Algún accidente cerebro vascular.
  • Aneurisma de aorta torácica.
  • Ganglios linfáticos inflamados.

Según el daño provocado, el síndrome puede dividirse en tres tipos:

  • Central: se produce por un daño en el hipotálamo, tronco encéfalo o médula cervical.
  • Preganglionar: producido por daño en la médula cervicotorácica, plexo braquial inferior, mediastino o región cervical anterior.
  • Postganglionar: se puede producir por daño en el ganglio cervical superior, arteria carótida interna, base de cráneo o seno cavernoso.

Es importante resaltar que el síndrome puede estar presente desde el nacimiento de un individuo; lo que significa que es congénito.

¿Qué síntomas presenta el síndrome de Horner?

A parte de los signos presentados por otros trastornos (en caso de ser el causante) existe una serie de síntomas característicos este síndrome, los cuales son la ptosis, miosis, anhidrosis, dilatanción retardada y heterocromía.

  • La ptosis se refiere a la caída del párpado, pero de forma incompleta.
  • La miosis por su parte se refiere a la pupila contraída, pero la diferencia con la pupila del ojo saludable es apenas notable; sólo en algunas situaciones específicas se podría observar una diferencia mayor (estado de alerta, oscuridad, entre otras).
  • La heterocromía se refiere a la pigmentación del iris. Sin embargo, esta es poco que suceda cuando se adquiere la patología; siendo más común cuando el origen es congénito.
  • La dilatación retardada, la cual no siempre está presente en los individuos afectados.
  • La anhidrosis se refiere a cuando hay pérdida de sudoración, algo que sólo sucede en los dos primeros tipos del síndrome de Horner.

El ojo afectado del individuo es el mismo que el lado donde se produjo el daño en las fibras nerviosas mencionadas anteriormente. De igual manera sucede con la sudoración.

Por último, también puede haber otros problemas asociados a los síntomas descritos. Por ejemplo, es mucho más fácil contraer conjuntivitis y la secreción nasal se ve aumentada en el lado afectado.

Tratamiento del síndrome de Horner

Hasta ahora no existe un tratamiento diseñado para tratar el síndrome de Horner específicamente, sino más bien según el origen del mismo se podrá disponer de diferentes opciones para tratarlo. Además, este síndrome no afecta la vida cotidiana de quiénes lo padecen, siendo el párpado caído el único síntoma que realmente puede llegar a causar molestia.

Con respecto al pronóstico, en la mayoría de casos si el problema que originó el síndrome es tratado rápidamente, el individuo afectado podrá olvidarse de la anormalidad. Lo que significa que dependerá del individuo y la causa.


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