Cerebro humano: Partes y funciones

El objeto más complejo del mundo es el encéfalo humano; el cual sido la base a partir de la cual se han generado todos los avances que conocemos en la actualidad. Sin embargo, a pesar de encontrarse dentro de nuestro cuerpo, su fisionomía y forma de trabajo es comúnmente ignorada por la mayoría de personas. Es por ello que en el siguiente artículo te presentamos información detallada y explicada de forma sencilla, con la que conocerás todo sobre la estructura y funcionalidad del encéfalo y el cerebro humano, su órgano más voluminoso.

Descubre qué es el cerebro humano

La palabra cerebro proviene del latín cerebrum, y sus componentes tienen origen indoeuropeo: ker, que significa “cabeza”, “en lo alto de la cabeza” y brum, que significa “llevar”. En base a esto, puede traducirse literalmente como lo que se lleva sobre la cabeza.

En la cultura popular es común que se considere al cerebro como la integración de toda la masa contenida en el cráneo humano, pero esta creencia es totalmente errónea. El cráneo contiene al encéfalo, y en el mismo está contenido el cerebro junto con otros órganos. Esta generalización se atribuye a que el cerebro es el órgano más voluminoso de la zona.

Una vez aclarado dicho punto, entonces hablaremos un poco del encéfalo; el cual se considera como la porción principal del sistema nervioso central, se encuentra ubicado en la cavidad craneal y está conformado por los hemisferios cerebrales (cerebro), el cerebelo y el tronco del encéfalo. Los mismos se detallarán más adelante.

El encéfalo pesa alrededor de 1400g, lo cual representa el 2% del peso corporal normal. A pesar de su tamaño, es el órgano encargado de la coordinación de todas las funciones que realiza el cuerpo humano. De ahí, que el encéfalo esté estrechamente relacionado con todas las actividades psíquicas, como el pensamiento, la imaginación, la concentración, o las emociones; así como también de actividades motoras, como caminar, el movimiento del cuello, los brazos y articulaciones, entre muchas otras como la digestiva, endocrina, procesamiento de diferentes estímulos.

En lo que respecta al procesamiento de estímulos, los mismos son percibidos a través de los receptores de los sentidos del tacto, olfato, visión, gusto y audio. Estos son transformados en impulsos nerviosos que serán procesados por el encéfalo para dar un significado, y esto es lo que hace posible la comunicación.

1) El cerebro humano

El cerebro es la parte más grande del encéfalo y, como su etimología lo indica, está ubicado en la cabeza del ser humano; específicamente en las fosas craneales anterior y media, ocupando así toda la bóveda craneal.

El aspecto externo del cerebro humano es similar al de una nuez, presentando diferentes hendiduras o depresiones, denominadas surcos, que formarán a su vez los plegamientos. A medida que el individuo se desarrolla, el cerebro crece a un nivel más rápido que el cráneo; es por ello que el tejido se pliega sobre sí mismo. A partir de esto, es importante resaltar que mientras más pliegues tenga este órgano, mayores serán sus capacidades.

Partes del cerebro humano

El cerebro se encuentra dividido en dos hemisferios, conformados por corteza cerebral, ganglios basales y sustancia blanca. Estos, a su vez, conforman la sustancia gris que lo recubre.

  • a) La corteza cerebral: es literalmente una fina capa externa del cerebro, por lo que cuenta con apenas unos centímetros de espesor. Es precisamente aquí donde se encuentran las capacidades cerebrales superiores, puesto que esta corteza está conformada por capas de neuronas dispuesta de forma horizontal y vertical, perfectamente identificables. Está enfocada en las áreas sensitivas somáticas y la percepción de los sentidos visual, olfatorio, auditivo y gustativo.

La corteza cerebral se encuentra dividida a su vez en tres áreas: la sensitiva, que procesan aferencias sensoriales y sensitivas para transformarlas en conciencia; las motoras, que se encargan del movimiento del esqueleto, y las de integración que mezclan las sensitivas y motoras.

  • b) Los ganglios basales: son grandes masas de fibra ubicadas debajo de la superficie del cerebro humano, a través de las cuales se transmiten impulsos en todas las direcciones. Se encargan del control de todo lo relacionado a la programación y ejecución de los movimientos (regulación de la actividad motora). De hecho, las enfermedades relacionadas a los ganglios basales tienen como síntomas característicos temblores corporales y movimientos no meditados.
  • c) La sustancia blanca: por su parte, se encuentra mayoritariamente en el interior del cerebro, dentro de la corteza. Está constituida por fibras nerviosas mielínicas de diferentes diámetros. Estas pueden ser comisurales, de asociación y de proyección. Estos haces de fibras permiten la transmisión de información desde un hemisferio a otro, a través del denominado cuerpo calloso.

Existen dos hemisferios cerebrales: el derecho y el izquierdo. Se trata de dos estructuras separadas, las cuales son casi iguales pero, al mismo tiempo, asimétricas. Sin embargo, no difieren demasiado en lo que a sus funciones respecta. Aun así, en cada individuo podrá haber cierto dominio de un hemisferio en comparación con el otro.

  • Hemisferio derecho: El hemisferio derecho recibe y crea información, haciendo un enfoque en lo no racional, lo visual. De hecho, se atribuye a éste la capacidad creativa de cada persona, desarrollando habilidades artísticas de diversos tipos en las personas en los que se presenta dominante. Sin embargo, su forma de procesar la información no es analítica, sino sistémica, de forma que no estudia cada uno de los elementos, sino el sistema que estos componen. A partir de un todo, deduce información específica. Es por ello que gracias a este hemisferio pueden comprenderse ciertas manifestaciones artísticas y recursos literarios como las metáforas, e incluso hacer interpretaciones sobre lo que soñamos.
  • Hemisferio izquierdo: En el hemisferio izquierdo se procesa la información de forma secuencial, siguiendo un sentido lógico y lineal. Esta información la analiza paso a paso, elemento por elemento, la cuenta y la verbaliza. Se caracteriza por estimular el pensamiento convergente, a través del cual se obtiene información nueva a partir de la que se adquiera. Por tanto, a partir del análisis de cada dato, creará información más general. Las personas cuyo hemisferio izquierdo es dominante presenta habilidades para las matemáticas, la lectura y la escritura.

partes del cerebro

A su vez, por medio de varios surcos, los hemisferios cerebrales se dividen en cuatro lóbulos: frontal, temporal, parietal, occipital, insular y límbico, cuyos nombres están atribuidos a los huesos de la cavidad craneal por los que son protegidos.

  • Lóbulo frontal: Representa alrededor de un tercio de la superficie del cerebro humano, y se encuentra ubicado delante del surco central del mismo. La función más resaltante del mismo es la predicción de las necesidades del individuo, a lo cual sigue la planificación y la programación de las mismas. La parte inferior del lóbulo frontal está dedicada a la articulación del habla, y otra parte muy cercana a la cisura central se enfoca en el control de los movimientos.
  • Lóbulo temporal: Este se localiza debajo dela cisura central, y su función está enfocada en la actividad auditiva, además su zona interna destaca en lo que se refiere al procesamiento de la memoria. El resto de su extensión contribuye en la integración de los sentidos del audio, visión y tacto.
  • Lóbulo parietal: El lóbulo parietal es difícil de delimitar, pero se considera la parte del cerebro que se encuentra detrás del surco central, debajo del hueso parietal. En él se reciben los impulsos nerviosos ligados a sensaciones de dolor, presión, tacto y temperatura. Su estimulación puede ocasionar sensaciones gustativas, sin embargo, se ha inferido que las lesiones en este lóbulo pueden ocasionar trastornos de la lectura.
  • Lóbulo occipital: Se encuentra ubicado detrás de los lóbulos parietal y temporal y es el encargado del procesamiento de las imágenes. A pesar de que no están ubicados en una zona propensa a lesiones, cabe destacar que una lesión en esta zona podría ocasionar alucinaciones, visión alterada del tamaño de los objetos e incluso ceguera.

2) El cerebelo

El cerebelo es una de las partes del encéfalo con mayor concentración de neuronas. Su función está ampliamente ligada al control y regulación de la actividad motora, en especial, la coordinación de los movimientos complejos. De igual forma, se involucra en el mantenimiento del equilibrio del cuerpo mientras se encuentre de pie, debido a su conexión con el oído interno, y en la orientación en el espacio.

3) El tronco del encéfalo

El tronco del encéfalo tiene forma de tallo, por lo cual también se le conoce como tallo cerebral. Se encuentra ubicado en la fosa craneal posterior del cráneo.  De manera general, juega tres papeles relevantes:

  • Control de la consciencia.
  • Control y regulación de la respiración y del sistema cardiovascular en general.
  • Servir como conducto conector de los tractos de la médula espinal con partes del prosencéfalo.
  • Contiene importantes nervios craneales.

El tronco del encéfalo está conformado por cuatro subdivisiones bien definidas:

a) El diencéfalo:

Es la porción del encéfalo ubicada entre el telencéfalo y el mesencéfalo. Está conformado por: el tálamo, el hipotálamo, subtálamo y epitálamo.

El tálamo:

El tálamo es la parte de mayor tamaño del diencéfalo y está ubicado en el centro del cerebro humano, encima del hipotálamo del cual se encuentra separado por el surco de Monroe, a cada lado del tercer ventrículo. Se trata de una gran masa con forma ovoide, la cual está compuesta por sustancia gris.

Una vez percibidos los estímulos a través de todos los mecanismos sensoriales del gusto, tacto, audio y visión, con la excepción del olfato, estos desembocan en el tálamo. Es decir, a este órgano llega toda la información adquirida a través de cuatro de los sentidos, y es por ello que se le considera como una estación de relevo de los mismos, donde se envían posteriormente a los hemisferios cerebrales para su interpretación.

El hipotálamo:

El hipotálamo tiene un tamaño similar al de apenas cuatro guisantes, pero no por ello sus funciones son menos importantes. De hecho, contrario a esto, este pequeño órgano lleva a cuestas tareas como la regulación del apetito, la sed y la temperatura; del control del sistema nervioso autónomo, el cual a su vez cumple la función de la estimulación de la contracción de las fibras musculares. Por último, es el encargado de regular la secreción de hormonas de la hipófisis y otras glándulas endocrinas.

Subtálamo:

El subtálamo está ubicado debajo del tálamo, es decir, se encuentra entre el tálamo y tegmento del mesencéfalo. Su estructura es sumamente compleja, pero se resumirá a la presencia de núcleos rojos y sustancia negra.

Epitálamo:

El epitálamo está conformado por el núcleo habernucular y la glándula pineal.

  • El núcleo habernucular: está conformado por un pequeño grupo de neuronas que se encuentran bajo la superficie posterior del tálamo. Es cree que es un ente integrador de las vías olfativas, viscerales y somáticas.
  • La glándula pineal: se encuentra ubicada justo detrás del tálamo. Se trata de un pequeño órgano que cumple la función de reloj biológico. La glándula pineal se encarga de la regulación de los ritmos del cuerpo, y en especial, de la actividad sexual.

b) El mesencéfalo

El mesencéfalo también es denominado cerebro medio, y varía entre embriones y adultos. En los primeros, se encuentra encima del rombencéfalo, y se irá desarrollando en la parte media del encéfalo.

La funcionalidad del mesencéfalo radica en el control de los reflejos asociados a los estímulos auditivos y visuales, y también, sus zonas más profundas presentan influencia en reflejos motores.

c) La protuberancia anular:

La protuberancia anular es también conocida con el nombre de puente troncoencefálico o puente de Varolio, se encuentra ubicada entre el bulbo raquídeo y el mesencéfalo.

En lo que respecta a sus características funcionales, este prominente segmento del tronco del encéfalo es considerado como el órgano que permite la conexión del mesencéfalo y el bulbo raquídeo con el cerebelo o los hemisferios cerebrales, a través de fibras nerviosas.  De igual forma, la protuberancia anular juega un papel importante en el control de la expresión de emociones desbordadas, como gritos espontáneos, los ataques de risa y el llanto.

d) El bulbo raquídeo:

También denominado como la médula oblongada, el bulbo raquídeo se localiza entre la protuberancia anular o puente troncoencefálico (por arriba) y la médula espinal (por debajo).  Tiene una longitud que ronda los 3 cm, y exhibe una forma similar a la de un cono, con su extremo ancho dirigido hacia el lado superior.

El bulbo raquídeo se encarga de la transmisión de impulsos desde la médula espinal hasta el cerebro humano. No obstante, también cumple otras funciones, entre las cuales se encuentra la regulación de la actividad cardíaca y respiratoria, la cual se atribuye a la sustancia gris presente en él. Por último, interviene también en la regulación de la secreción de jugos digestivos (actividad digestiva) y control de los músculos implicados en la deglución, y tos, vómitos, función de tragar, entre otros.

Esperamos que este artículo sobre el cerebro humano haya sido de tu agrado, puesto que hemos incluido toda la información relacionado con él y el encéfalo en general, es decir, las partes que lo componen. Si quieres leer más acerca de temas similares, te recomendamos visitar otros artículos del sitio.


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