Los tipos de líderes

Liderazgo en una reunión

Un líder tiene que ser una persona que cuente con unas actitudes determinadas que le permitan conseguir influir a un equipo de personas con la visión de alcanzar un objetivo determinado. Cabe destacar que existen distintos tipos de líderes, algunos de ellos considerados positivos, mientras que otros no lo son tanto, pero en cualquier caso es esencial que conozcamos sus características más destacadas con el fin de entender tanto las ventajas como los inconvenientes de cada uno de ellos.

Definición de liderazgo

Se puede definir liderazgo como un conjunto de habilidades directivas. De este modo, todo ello se centrará en una persona o personas que influirán en su grupo de trabajo. ¿De qué modo?, pues conseguirán que dicho grupo sea más eficaz y esté más motivado para conseguir mejores resultados.

Aunque para ampliar la definición de liderazgo también es la unión de tomar la iniciativa, así como la motivación, que hemos mencionado, promover y gestionar un mismo proyecto. No se tiene que tomar el liderazgo como algo negativo, por lo menos en su definición. Porque aunque uno sea el que lleve la iniciativa, también depende del grupo para que todo siga su curso.

El líder autoritario

El líder autoritario es aquel líder que se encarga de tomar decisiones pero sin tener en cuenta la opinión de los demás. A menudo cuenta con asesores que le pueden guiar en esta toma de decisiones, pero la última palabra es siempre la suya, e incluso aunque los asesores estén en contra de una decisión determinada, él siempre podrá optar por ella en caso de que lo estime oportuno.

Cabe destacar que no tendrá que dar ningún tipo de explicación acerca de las decisiones que tome, de manera que habitualmente se basan fundamentalmente en que el fin justifica los medios, lo que significa que a menudo acaba equivocándose y tarde o temprano esto supone una pérdida importante para el grupo al que lidera.

El líder carismático

El líder carismático es aquel que consigue el cargo gracias a su carisma, su personalidad y su forma de ser, de manera que trasmite algo positivo e incluso llega a inspirar a las personas del grupo al que pertenece.

Para conseguir alcanzar este tipo de liderazgo es necesario tener una confianza en sí mismo muy fuerte, de manera que consigamos transmitirla al resto del equipo y en general logremos que crean profundamente en nosotros, es decir, si el líder carismático dice que es posible, todos sienten que realmente es posible.

Dentro de estos líderes, habitualmente hablamos de personas que tienen una gran influencia en la sociedad, es decir, un líder carismático no llega de la nada, sino que se forja a partir de sus acciones, lo cual inspira a sus seguidores. Cabe destacar que este tipo de liderazgo puede ser tanto positivo como negativo dependiendo de las decisiones que tomes el líder, y sobre todo, los seguidores habitualmente van a acatar las decisiones tomadas por él, de manera que, aunque puedan existir recomendaciones y asesoramiento para que esas decisiones sean lo más acertadas posible, en ocasiones se cometen errores debido a que el propio líder puede incluso llegar a endiosarse.

De esta manera podemos encontrar líderes tan opuestos como Adolfo Hitler y el Papa Juan Pablo II, así como otros carismáticos que hicieron de su causa una razón para seguirlos.

El líder democrático

Los tipos de líderes

El líder democrático sería todo lo contrario del líder autoritario, es decir, se trata de un líder que va a tomar las decisiones en base a las opiniones de los demás, de manera que se plantea el problema, se escuchan las posturas así como los consejos del resto del grupo, y finalmente se toma una decisión en base a ello.

Generalmente se tomará la decisión en base a una votación en la que participarán todos los presentes.

Este tipo de liderazgo puede ser muy positivo, pero también cuenta con algunos aspectos negativos como el hecho de que muchas veces el resto del equipo puede considerar que algo es positivo cuando en realidad es negativo para el proyecto. Un buen ejemplo sería si preguntásemos a los trabajadores de una empresa si quieren vacaciones pagadas durante 10 meses al año, de manera que evidentemente la votación sería a favor de trabajar sólo dos meses al año, pero evidentemente esto haría que la empresa quebrase.

Por esa razón, en muchos lugares donde existe un líder democrático, tan sólo se formulan y se someten a votación cuestiones para las que el resto del grupo esté capacitado de forma objetiva a decidir, mientras que el resto de decisiones se toman en base a las opiniones y consejos de un grupo más reducido.

Por ejemplo, dentro de una empresa nos podemos encontrar con un líder democrático al que los trabajadores le solicitan que coloque una máquina de pastelitos, de manera que este líder consulta con sus mandos más directos para tomar una decisión de si esa máquina va a ser beneficiosa o puede perjudicar de alguna manera a algunos trabajadores o al propio negocio. En base a los consejos, la decisión se entiende que será la más acertada.

El líder empresarial

En cuanto al líder empresarial se trata de un tipo de líder centrado en los proyectos de negocios, teniendo una capacidad de decisión y una influencia que lo hacen destacar por encima de otros empresarios, de manera que incluso estos buscan trabajar con él.

En definitiva es un tipo de líder que, haciendo las cosas mejor o peor, siempre consigue su objetivo, con lo cual se convierte en un ejemplo dentro del mundo empresarial.

El líder espontáneo

El líder espontáneo es un líder que nace a partir de un imprevisto, es decir, no se trata de alguien que haya sido elegido para ocupar el cargo, sino que debido a unas circunstancias, automáticamente se encuentra situado en una posición en la que tiene que asumir el mando y tomar la decisión acerca de las acciones que se van a llevar a cabo.

Generalmente este tipo de líder nace a partir de los conocimientos que ostenta dicha persona, de manera que el resto del equipo lo reconoce como una persona capacitada y preparada para afrontar una responsabilidad tan seria como esta.

Un ejemplo en este caso podría ser por ejemplo un grupo de personas que se encuentran en medio de una catástrofe, y para poder salir con vida, lo que hacen es seguir a alguno de ellos que se ha convertido en líder espontáneo, ya sea porque es el que más conocimientos tiene en relación con la situación (militar, ingeniero, bombero, etc.) o incluso porque su carisma y su capacidad para tomar decisiones lo hacen más apto para ponerse a la cabeza del grupo.

El líder liberal

El líder liberal es aquel que delega parte de las decisiones a otras personas, con lo cual otorga una pequeña fracción de liderazgo al resto de miembros del grupo.

Los tipos de líderes

Cabe destacar que tiene ciertas semejanzas con el líder democrático, además de que habitualmente tan sólo se conceden estos poderes a personas cercanas al propio líder, no al resto de la comunidad, de manera que habitualmente el resto de personas que formen parte del grupo no tendrán ningún tipo de poder de decisión en este sentido, salvo, claro está, que se opte por un liderazgo democrático en el que, con su voto, puedan tomar decisiones de forma directa.

El líder político

En cuanto a líder político hablamos efectivamente de un tipo de líder que presenta unas cualidades adecuadas en el campo de la política, consiguiendo de esta forma que una buena parte del pueblo confíe en él.

Es muy importante tener en cuenta que un líder político no tiene por qué haber sido elegido por su pueblo, sino que se gana la simpatía de un sector de la población por sus ideales o por su forma de actuar. De esta manera, aunque puede haber un líder político oficial en un determinado país, también pueden existir otros líderes políticos con políticas más o menos parecidas a la que sigue el que gobierna.

El líder religioso

Un líder religioso es aquel que ostenta un cargo eclesiástico de importancia, consiguiendo que los seguidores de dicha religión se inspiren y los sigan en su toma de decisiones.

Aunque fundamentalmente hablamos de este tipo de líder cuando nos referimos a aquellos que alcanzan el cargo dentro de la institución, también existen otros líderes religiosos que no forman parte de la misma pero que sí consiguen los seguidores, de manera que un ejemplo destacado en este sentido sería por ejemplo Jesús cuando comenzó a promulgar su fe.

El líder social

El líder social es un tipo de líder que forma parte de un movimiento concreto, de manera que influye a otras personas con el objetivo de apoyar un ideal determinado o incluso una acción específica.

Generalmente, este líder buscar alternativas a las existentes en base a las necesidades de la sociedad, pero también cabe destacar que a menudo se centra única y exclusivamente en núcleos muy limitados, de manera que ignora las necesidades de la mayoría, pero a través de su acción social logra conseguir seguidores que le darán un mayor poder ya sea político, religioso, social, etcétera.

En cualquier caso, estos líderes no sólo atraen a mayores o menores multitudes, sino que además también ejercen poder sobre ellas así como en su toma de decisiones.

El líder tradicional

Líder tradicional

En cuanto al líder tradicional, se trata de un líder que ostenta el poder al alcanzar el cargo, pero llega allí a través de una tradición, es decir, mediante una herencia.

Aquí podríamos hablar del hijo que hereda la empresa del padre, o incluso el príncipe que se convierte en rey, de manera que nos podemos encontrar con que el líder posee las cualificaciones necesarias para un buen liderazgo, o que por contra pueda perjudicar la causa que lidera por su desconocimiento.

Hasta aquí hemos llegado con nuestra clasificación enumerando los tipos de líderes más importantes, teniendo todos ellos una capacitación que no tiene por qué ser académica pero que les otorga un mayor valor por encima del resto de personas de su ámbito.

Por supuesto, en la mayor parte de los casos es imposible que se pueda forzar el convertirse en un líder determinado, pero adaptando aspectos relacionados con nuestras costumbres y nuestra forma de comunicarnos, es muy posible que algún día consigamos ser el líder perfecto.

Otros tipos de líder

  • Líder autócrata: Este tipo de líder es el que va a iniciar la acción, además de dirigir y controlar. Sin duda, ésas son sus principales funciones. Pero es que además, a la hora de tomar decisiones, será el que asuma todo tipo de responsabilidades. Por lo que si dichas decisiones no salen como se esperaba, nadie más podrá tener la culpa.
  • Líder proactivo: Antes decíamos que no siempre hay que ver los tipos de líderes o el liderazgo como algo negativo. Porque si todavía no te lo has encontrado, puedes estar ante un líder proactivo. En este caso será quien promueva el desarrollo y todo el potencial de las personas que estén a su alrededor. Una manera de incentivarlos plenamente para obtener grandes resultados y siempre, en equipo.
  • Líder audaz: Porque se necesita un tipo de líder que haga frente a todo. De ahí que tenga más que merecido su puesto. En este caso, al hablar del líder audaz, hacemos referencia a todo aquel que puede relacionarse con diversas instituciones así como personas. Será una persona muy persuasiva, es cierto, pero siempre con una visión muy positiva.
  • Líder servidor: Como su nombre indica es el líder que no fija sus propios objetivos y que no busca cumplir con sus necesidades propias, sino que se centra en los demás. Las necesidades sociales serán su prioridad y de ahí el nombre de líder servidor.
  • Líder transformador: Será el que se enfrente a los problemas. Pero es que además será el que produzca e impulse cambios de tipo social. Desde luego, es una persona muy imaginativa que al mismo tiempo, se adaptará a los cambios y diferentes procesos. Sabe escuchar y al mismo tiempo, se motiva recopilando información para ponerla en marcha. Como resumen, podemos decir que asume tanto derechos como deberes.

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