Síndrome de Morris o Pseudohermafroditismo masculino — Definición, síntomas, causas y tratamiento

Es increíble la cantidad de síndromes, trastornos y patología que existen, como por ejemplo el síndrome de Morris o pseudohermafroditismo masculino; ya que es una enfermedad sumamente extraña donde el individuo afectado tiene un genotipo y fenotipo de diferentes sexos.

¿Qué es el síndrome de Morris?

Este síndrome se define como una anomalía física, en la que una persona cuenta con la genética de un sexo (masculino) y los genitales de otro (femenino). Esto es conocido científicamente como pseudohermafroditismo masculino  (el femenino se conoce como síndrome adrenogenital).

La anomalía se debe a que los hombres son inmunes a las hormonas masculinas, es decir, los andrógenos. Lo cual provoca el desarrollo no sólo de los órganos genitales del otro sexo (o similar a ellos); sino que también el aspecto puede ser de una mujer y no darse cuenta de la patología hasta la adolescencia, en la que no llegaría la menstruación.

Algunas características que presentan las personas afectas son:

  • Rasgos femeninos.
  • Órganos sexuales femeninos o similares.
  • Testosterona a niveles similares a los del hombre, pero debido a la patología los andrógenos no pueden actuar normalmente.

El síndrome de Morris es una enfermedad muy extraña, ya que afectan tan sólo a 1 de cada 30.000 bebés niños nacidos. Sin embargo, debido a que sólo se han contabilizado algunos casos, es posible que la recurrencia sea mayor.

Además, cabe destacar que un individuo puede estar afectado total o parcialmente por el síndrome. En el primer caso, presentará rasgos femeninos incluyendo el órgano sexual; mientras que en el segundo, tendrá rasgos masculinos pero con anomalías en sus órganos sexuales, como la aparición del micropene.

Conoce los síntomas del síndrome de Morris

Como comentábamos, puede haber personas que el síndrome les afecta de forma leve o severa. Sin embargo, los síntomas mencionados se referirán de manera general, ya que cada individuo puede presentar signos o características diferentes de los demás.

  • En la forma severa, los genitales son femeninos pero a veces pueden presentar problemas como un tamaño muy reducido, “vagina ciega” (sin conexión a otro órgano) o hipoplasia en los labios de la misma.
  • La mayoría poseen testículos, pero estos no descendieron. Los cuales suelen extirparse para evitar el desarrollo de cáncer en el futuro.
  • En algunos casos de síndrome de Morris es posible que hayan o no ovarios, aunque a veces pueden aparecer atrofiados.
  • A las personas afectadas no les aparece (o lo hace de forma leve) vellos en las axilas o el pubis.
  • En la pubertad no hay menstruación, ya que genéticamente es hombre.
  • Los individuos afectados son infértiles.

Causas del síndrome de Morris

La enfermedad es de carácter hereditario, donde existe una mutación en un gen que se encuentra en el cromosoma X. La cual provoca el problema con los andrógenos que no permite actuar en conjunto con la testosterona para la formación o desarrollo masculino; lo que significa que el hombre es inmune a la testosterona.

Para explicar el proceso de forma mucho más sencilla, debe tenerse en cuenta que las mujeres presentan los cromosomas XX; mientras que los hombres los XY. Su principal diferencia es que los hombres producen testosterona y esta hormona se encarga del desarrollo del individuo masculino. Cuando el cuerpo tiene ausencia de la misma, entonces el individuo se desarrolla como una mujer externamente a pesar que en el interior sigue siendo hombre.

Diagnóstico del Pseudohermafroditismo masculino

El diagnóstico no suele hacerse en la etapa de la niñez del individuo, puesto que en ese momento aún no presenta síntomas que indiquen que posee el síndrome de Morris. Es en la etapa de la pubertad cuando el problema es notorio, donde los profesionales en el área podrán realizar diferentes pruebas para diagnosticar a la persona:

  • Un estudio cromosómico puede constatar la existencia del cariotipo 46 XY, característico de las personas que presentan el síndrome.
  • A través de un estudio hormonal también se puede observar cómo están los niveles de la testosterona, las hormonas estimuladoras del folículo, luteinizantes y estradiol.
  • Debido a que la vagina suele ser ciega y de pequeño tamaño, con la ayuda de un ultrasonido ginecológico se podría observar la ausencia de útero u ovarios (en algunos casos).

Tratamiento para el síndrome de Morris

Esta patología no se puede “curar”, sino más bien adaptar al individuo al sexo con el que está identificado; de manera que así pueda llevar su vida con normalidad y en algunos casos, ser capaz de reproducirse sin ningún problema.

Los individuos afectados con el síndrome, suelen utilizar tres tratamientos: terapia de dilatación, gonadectomía y terapia psicológica. A continuación te lo explicaremos brevemente:

  • La terapia de dilatación se utiliza para agrandar la vagina, que es de tamaño reducido. De esa manera podrá tener relaciones sexuales con normalidad y evitar el dolor.
  • Con la ayuda de la gonadectomía, se extirparán los testículos que no descendieron; esto para evitar el desarrollo de tumores.
  • Por último, la terapia psicológica ayudará a que el paciente pueda sentirse a gusto con su cuerpo.

Además, en algunos casos también se toman en cuenta las siguientes opciones:

  • Rutina de ejercicios y consumir vitaminas o suplementos.
  • Si es necesario, el paciente puede optar por una neovaginoplastia para reconstruir el órgano femenino.
  • En algunas personas se ha utilizado tratamientos hormonales.

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