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āSe buscan hombres para expedición arriesgada. Poco dinero, mucho frĆo, largos meses de completa oscuridad, peligro constante, retorno dudoso y honor y reconocimiento en caso de Ć©xitoā.
AsĆ empieza una increĆble historia de superación personal. Este fue el reclamo que se utilizó en 1913 para dar comienzo a una de las mĆ”s increĆbles aventuras de los Ćŗltimos tiempos.
Ernest Shackleton fue el autor de esta anuncio. Un hombre legendario que resaltó, sobre todo, por sus valores.
Ernest Shackleton no logró el éxito en su vida pero su gran fracaso fue su mayor victoria. Digamos que aprendió a fracasar para lograr el éxito. Forma parte de la pequeña lista de extraordinarios aventureros que se embarcaron hacia la conquista de la AntÔrtida al comiendo del siglo XX.
Fueron dos las ocasiones en que Shackleton quiso conquistar el Polo Sur y fracasó en ambas; en la primera, fue el acompañante de Scott en 1903 y en la segunda, hizo una expedición que organizó él mismo en 1908 y en la que estuvo a 160 Kilómetros del centro del Polo Sur.
En 1914, cuando ya se habĆan conquistado los dos polos, no pudo olvidarse de la atracción de estos dos hemisferios y el imparable ansia de adentrarse en lo inexplorable. Shackleton quiso atravesar la AntĆ”rtida, desde el Mar de Weddell al Mar de Ross. Era una distancia de 2.000 kilómetros en las condiciones mĆ”s adversas del mundo con un viento gĆ©lido capaz de cortar a un hombre por la mitad.
Sus dos fracasos anteriores de lograr la conquista al Polo Sur dieron paso a esta increĆble historia que se convertirĆa en Ā«El Gran FracasoĀ».
La Gran Historia
A las seis semanas de partir su barco, El Endurance, quedó atrapado en el hielo del Mar de Weddell. El barco y sus tripulantes quedaron atrapados mÔs de 17 meses en aquel gigantesco pedazo de hielo flotante y fueron a la deriva.


El barco quedó destrozado debido a la fricción de las placas de hielo y sus 17 tripulantes arrastraron penosamente sus botes salvavidas por todo ese mar de hielo congelado.
Finalmente alcanzaron aguas abiertas y se echaron a la mar. Durante 7 interminables jornadas tuvieron que sortear amenazantes tĆ©mpanos de hielo, terrorĆficas tormentas y orcas nada amistosas que permanentemente les acompaƱaban. Finalmente llegaron a Isla Elefante, una inhóspita isla rodeada de acantilados de hielo.
Shackleton tomó la decisión de embarcarse otra vez en el mar junto con 5 de sus hombres para intentar llegar a Georgia del Sur, la tierra que los vio partir. DeberĆan enfrentarse a los peligros de ese mar hostil y a las temibles condiciones meteorológicas.
DespuĆ©s de 17 interminables dĆas, Shackleton y sus hombres alcanzaron las costas del Georgia. Shackleton junto con sólo dos de sus hombres (los demĆ”s podĆan morir) tuvieron que adentrarse en un territorio hostil enfrentĆ”ndose a montaƱas superiores a los 3.000 metros para alcanzar las costas balleneras en donde podrĆan buscar ayuda.

Finalmente logró rescatar a todos sus hombres, tanto a los que se habĆan quedado en Isla Elefante como a los que se habĆa quedado en la costa inhóspita de Georgia del Sur.
Una hazaƱa de tal magnitud sólo podĆa ser lograda gracias a un hombre con una gran determinación y capacidad para sacar lo mejor de sus hombres.
Os dejo un vĆdeo de cinco minutos que reproduce en imĆ”genes esta estupenda historia de superación personal: