El movimiento Slow comenzó con una protesta contra la apertura de un McDonald’s en la Piazza di Spagna, Roma. Provocó la creación de una organización llamada Slow Food («comida lenta»). Con el tiempo, se extendió a otras áreas, tales como el Slow Travel («viajar lentamente»).
Geir Berthelsen y su creación del Instituto Mundial de la lentitud en 1999 consideran la necesidad de enseñar al mundo las ventajas que tiene tomarse la vida más pausadamente.
Vivimos en un mundo que cambia vertiginosamente a nuestro alrededor. Sin embargo, conviene recordar que nuestras necesidades básicas no cambian nunca. La necesidad de ser querido, de pertenecer a un grupo social o de atención por parte de los demás. Para todas estas cosas se necesita tiempo y calma. Con el fin de dominar todos estos cambios tenemos que recuperar la calma y la reflexión.
El movimiento Slow no está organizado y controlado por una organización singular. Sin embargo, tiene muchos seguidores.
A pesar de que ha existido, de alguna forma, desde la Revolución Industrial su popularidad ha crecido considerablemente desde el ascenso de Slow Food y Cittaslow («ciudades lentas») en Europa.
Las Cittaslow tienen como objetivo resistir a la homogeneización y la globalización de pueblos y ciudades, y tratar de mejorar la calidad y el disfrute de la vida mediante el fomento de la felicidad y la autodeterminación.
Os dejo un VIDEO que resalta las principales características de este movimiento slow: