La psicología perinatal es la disciplina que se centra sobre todo en el bienestar de padres, madres y el bebé que ha nacido o está por nacer. Un psicólogo perinatal trabaja con las familias durante el período perinatal, antes y después del nacimiento.
En un Centro de Psicología Perinatal, se centran en la planificación del embarazo y parto, el embarazo, el posparto y la crianza de los hijos (sobre todo en las primeras etapas).
¿Cuándo se busca atención psicológica perinatal?
Las razones para buscar ayuda durante estos tiempos son amplias, pero incluyen sentirse con ansiedad, depresión, tener dificultades para concebir, perder a un bebé, tener un bebé enfermo, no sentirse vinculado y no disfrutar de la maternidad/paternidad.
Pero, ¿cómo saber si sería útil consultar a un psicólogo en estos momentos? Puede ser difícil saberlo con seguridad, ya que hay muchos factores que están cambiando rápidamente en poco tiempo. Cuando las mujeres y los hombres luchan durante el embarazo o después de tener un bebé, es difícil saber cuánto atribuir a la biología, cuánto a las circunstancias cambiantes y si está ocurriendo algo más serio que justifique un tratamiento profesional.
¿Y qué es normal de todos modos? En estos momentos, los padres no tienen un punto de referencia para medir y puede ser difícil descifrar si lo que estás sintiendo es simplemente un ajuste a una nueva vida o algo más serio. Así que aquí hay un factor clave para decidir si buscas ayuda: si tu situación te angustia y tu angustia no se resuelve en un par de semanas, entonces esa es probablemente una buena señal para buscar ayuda. Un psicólogo perinatal puede ayudar si:
- Te sientes con angustia
- Sientes que no serás capaz de ser madre/padre
- Quieres oi necesitas más apoyo
- Las cosas no mejoran por sí solas
Cualquier persona que esté en estos procesos debe recordar que no está solo/a. Es común sentirse tambaleante en esta fase cambiante de la vida, o al menos, sentirse así alguna vez. Es normal que existan hombres, mujeres, padres y madres con inquietudes. Un psicólogo perinatal ayudará a estas personas a que encuentren el equilibrio y tengan menos miedo tanto de uno mismo como de la crianza.
Son profesionales que se dedican a apoyar a los padres para que disfruten de la paternidad y después sean capaces de apoyar el desarrollo de su bebé. Que sientan la satisfacción de que dentro de la imperfección de la crianza está la perfección de ver crecer a los hijos.
Es un plan de acción para los padres
Además, el camino del desarrollo desde el embrión hasta el feto y desde el recién nacido hasta el recién nacido tiene el potencial de ejercer influencias críticas en la salud mental y física del nuevo individuo a lo largo de su vida. La psicología ha generado nuevos entendimientos de estos procesos que son relevantes para la salud mental de las madres y sus hijos… por eso existe la psicología perinatal.
La psicología proporciona un “plan de acción” para mejorar la atención en esta fase de la vida. Su objetivo es identificar formas psicológicas de facilitar la transición a la maternidad y la salud y el bienestar de las mujeres, los hombres y sus bebés. Es una perspectiva personal, en lugar de un intento de proporcionar una revisión exhaustiva de la literatura o las guías clínicas relacionadas con la amplitud de la atención de salud mental perinatal.
Principios de la psicología perinatal
Existen 7 principios generales que se basa la psicología perinatal y que es necesario conocer para poder hacerse una idea de su línea de actuación:
- La concepción, el embarazo y el parto son procesos naturales.
- Las mamás embarazadas y los bebés comparten experiencias.
- Los bebés son conscientes y expresivos.
- Los bebés necesitan apoyo amoroso para un desarrollo óptimo.
- Las primeras relaciones del bebé son la base de todas las relaciones.
- La experiencia afecta dramáticamente el desarrollo de los cerebros de los bebés.
- Las impresiones de experiencias tempranas se pueden mejorar o transformar en cualquier momento.
Además de estos principios, el trabajo de la psicología perinatal se centra en las siguientes líneas de trabajo para pode garantizar que tanto padres, madres y bebés estén atendidos todo el tiempo:
- Proporcionar atención emocional específicamente dirigida a las mujeres desde el inicio del embarazo
- Reconocer el potencial de los procesos de atención para crear ansiedad y preocupaciones.
- Facilitar la transición a la maternidad y el apego durante el embarazo, brindando la oportunidad de pensar y hablar sobre el yo como madre.
- Brindar atención durante el embarazo que ofrezca oportunidades adecuadas para discutir el trabajo de parto y el parto, y ayuda a las mujeres a abordar el parto con tolerancia a la imperfección, la imprevisibilidad y la incertidumbre.
- Asegurar de que el impacto psicológico de la partera en el proceso de parto se comprenda a través de la capacitación y la implementación de políticas. Para que una mujer pueda trabajar y dar a luz de manera efectiva, necesita sentirse segura y tranquila. La amenaza percibida y real puede tener un efecto fisiológico que puede retardar e incluso detener el parto.
- Facilitar el apoyo disponible en el entorno natural, no se olvide de los papás. Este principio se aplica en todas las etapas del embarazo, el parto y el período postnatal.
- Maximizar la oportunidad y la comprensión de la unión entre madre e hijo. Hay un número significativo de madres que luchan por establecer vínculos con sus bebés . A veces, esto se conoce como el «último tabú» en el que las madres a menudo no pueden admitir su falta de sentimientos, o sentir sentimientos de irritación, disgusto u hostilidad hacia su hijo. Esto puede resolverse con el tiempo, pero si no tiene el potencial de convertirse en un problema oculto pero grave que puede tener un efecto profundo en el desarrollo a largo plazo del niño. Esta disciplina que se proporciona de manera rutinaria después del nacimiento puede ayudar a desestigmatizar las dificultades de unión y sugerir enfoques o servicios que puedan facilitar una mejoría temprana en la relación madre-hijo.
- Reconocer el rango de angustia postnatal y asegurarse de que esté disponible la atención adecuada.