Si te gusta la psicología sabrás que hay muchas personas que destacaron por sus teorías o pensamientos, y una de las más influyentes siempre ha sido Kurt Lewin. Fue investigador e impulsor de la psicología de la Gestalt, pero además también es considerado como padre de la psicología social y de organizaciones. Por si fuese poco, fue el creador de la teoría del campo, que ha sido la base para desarrollar investigaciones en dinámicas de grupo, ideales para organizaciones y empresas.
Antes de la llegada de Kurt Lewin, los comportamientos humanos se entendían como el comportamiento animal, simplemente como reacciones. Los científicos intentaban explicar la conducta humana que se centraba en estímulo y respuesta: si te pegan, te defiendes, por ejemplo. Aunque con el tiempo y gracias al pensamiento de algunos investigadores como la aportación de Kurt Lewin, se dieron cuenta que esta relación de estímulo y respuesta era demasiado básica para ser real en las personas. Por esto, este investigador prestó atención a la interacción de los grupos con el ambiente y por ello, apareció la psicología social.
Un poco de su vida
Kurt Lewin nació en 1890 en una familia judía que vivía en Mogilno, un pueblo que pertenecía al reino de Prusia, lo que ahora se conoce como Polonia. Se trasladó con su familia a Berlín y allí comenzó a estudiar medicina y en cuando se mudó a Munich estudió biología. Cuando volvió a Berlín sin haber acabado su formación se interesó más por la psicología y la filosofía. Estaba vinculado al socialismo, al marxismo y a la lucha por los derechos de la mujeres, ya que creía en la igualdad.
Finalmente se establece en Estados Unidos donde comenzará a dar clases en la universidad. Él pensaba fervientemente que para poder cambiar un sistema, primero había que entenderlo y para comprenderlo, era necesario entender el comportamiento humano. Para su teoría de campo se centró también en la teoría de la relatividad y en la física cuántica. Quería estudiar el comportamiento humano dentro de su ambiente natural.
La teoría de campo
Para su teoría de campo estableció dos condiciones. La primera era que la conducta se deduce en su totalidad con hechos coexistentes y la segunda, que estos hechos coexistentes tienen un carácter de campo dinámico, es decir, que cada una de las partes del campo depende de las otras.
En un campo, la física tiene que ver con el espacio donde se encuentra la persona y las características del mismo (temperatura, fuerzas, clima, etc). Lewin usó el término “campo de fuerzas” en su teoría de campo para poder entender así los factores ambientales que influyen en la conducta humana.
En este sentido, y según la teoría, el comportamiento humano no depende solo del pasado o futuro de las personas, sino de los hechos y acontecimientos que está viviendo la persona en la actualidad y en cómo lo percibe. Los hechos están interconectados y se conoce como espacio vital. Esto crearía la realidad de la persona y la percepción de la misma. Según el investigador, si no hay cambios en el campo no hay cambios en la conducta.
Para Lewin y su estudio del comportamiento, el estudio debe centrarse en la persona y el entorno como partes iguales, y de ningún modo se debería estudiar de forma separada. Lewin comprendió que las personas no son pasivos ante los estímulos y que por tanto, reaccionan ante éstos y actúan dependiendo de la percepción que tengan de ellos. La interacción con el entorno era fundamental para el estudio de Kurt Lewin.
Un ejemplo para entenderlo mejor
Para entenderlo mejor, explicaremos un ejemplo. Imagina que estás estresado en el trabajo y que al llegar a casa con ese estrés en tu mente a causa del entorno, tus hijos comienzan a comportarse mal en el hogar. Posiblemente y debido al estrés que sientes, tu reacción sea inadecuada y quizá, pierdas la paciencia rápidamente con tus hijos debido a tu percepción estresante de ese día.
En cambio, imagina la misma situación provocada por tus hijos pero en un contexto diferente. Imagina que estás de vacaciones, que estás relajado y que no tienes ningún tipo de preocupación que te atormente el día. En este contexto, tus hijos pueden tener el mismo mal comportamiento, pero tu estado interior será diferente debido a tu interacción con el entorno.
Al tener un estado mental más relajado, posiblemente tu reacción hacia la conducta de tus hijos sea completamente diferente, centrado más en la comprensión y una buena crianza. Como ves y siguiendo la teoría de campo de Kurt Lewin, existe un proceso de cambio que ese desarrolla en un campo dinámico en el que el estado de cada parte del campo de fuerza afecta a todas las demás. La conducta en cada caso, tiene una finalidad.
Diferentes variables
Como en toda teoría, también existen variables que se deben tener muy presentes. Todas las partes se afectan entre sí y las variables pueden ser a nivel individual o grupal. Lewin consideraba tres variables indispensables para tener en cuenta: la fuerza, la tensión y la necesidad.
La fuerza es la que causa la motivación y las acciones. Cuando existe una necesidad hay una fuerza que provoca la acción o actividad… puede ser negativo o positivo. La conducta que resulta es debido a las diferentes fuerzas que se combinan.
La tensión es la diferencia entre las metas que se tienen en mente y el estado actual de la persona. La tensión pierde ser interna y nos lleva a la intención que posteriormente se puede convertir en acción.
Por último, la necesidad es lo que inician las tensiones motivadores. Cuando una persona tiene una necesidad física o psicológica en una persona, aparece un estado interno de tensión que hará que la persona actúe para satisfacer esa necesidad.
Con estas tres variantes Lewin y su teoría de campo determinan cuáles pueden ser las conductas posibles e imposibles de la persona. Conocer todo esto, puede hacer que se pueda anticipar el comportamiento de una persona, o al menos, saber cuál sería la conducta intencional o motivadora.