Antes de que existiera Internet no existía el ciberbullying, solo se conocía una forma de acoso escolar: el bullying. Un problema que desde siempre ha sido una lacra para millones de niños y niñas, afectando sus vidas en la infancia e incluso en la vida adulta, en forma de traumas. Los niños eran acosados en la parada del autobús, en el autobús, en las clases ante la mirada indiferente de muchos profesores, en el recreo, a la salida de la escuela, en los cuartos de baño del centro educativos, etc.
En la actualidad sigue existiendo el bullying, pero también con Internet, se ha creado una forma igual de devastadora para las víctimas: el ciberbullying. Ahora cuando el niño que sufre bullying llega a casa el acoso ya no se detiene. Donde debería ser su lugar de refugio se convierte en una extensión de la pesadilla. Ahora con la tecnología, el acoso sigue por Internet y puede suceder en cualquier lugar y en cualquier momento.
Aunque es cierto que a los padres les puede dar miedo solo el hecho de pensar que sus hijos pueden ser intimidados o amenazados sin parar, es una realidad que desgraciadamente ocurre. En las redes sociales, los agresores pueden lastimar a otros niños durante las horas de la noche. ¿Quieres saber más sobre el ciberbullying o ciberacoso y cómo deberías proteger a tu hijo?
Formas de ciberbullying
El ciberbullying se da cuando los niños o adolescentes usan la tecnología e Internet para hacer daño emocional a otros niños. No usan golpes físicos, sino emocionales. Usan el miedo, la agresión verbal, la humillación, los rumores… para hostigar y avergonzar a otros niños. Se hace con intención de hacer daño, por lo que piensan qué decir antes de hacerlo. Los agresores son cobardes y se sienten muy valientes detrás de la pantalla del ordenador de su casa (o de su teléfono móvil).
Hoy en día, tanto los niños como los adolescentes utilizan las redes sociales, los mensajes de texto y de correo electrónico para hablar con sus amigos. Por este motivo, el ciberbullying puede ocurrir fácil y rápidamente. Los mensajes crueles, las fotografías hechas sin que la víctima lo sepa, rumores… todo lo envían a otras personas de la escuela sin esfuerzo, solo haciendo clic. Esto ocurre en cualquier momento del año. Los fines de semana, por las tardes, durante las vacaciones, durante la semana escolar. No importa el cuándo se hace, el peligro es que se hace y afecta a las víctimas.
El ciberbullying lo hacen niños en solitario o en grupo, algunos tipos de comportamientos de este tipo de acoso son:
- Enviar correos electrónicos, mensajes de texto o mensajes instantáneos
- Enviar mensajes neutrales a alguien hasta el punto que se convierte en acoso
- Publicar cosas hirientes sobre alguien en redes sociales
- Difundir rumores sobre alguien por redes sociales
- Burlarse de alguien a través de mensajes privados, en grupo o por redes sociales
- Atacar o matar a un avatar o personaje en un juego en línea, constantemente y a propósito.
- Crear perfiles de redes sociales falsos
- Amenazar o intimidar a alguien por Internet o mensajes de texto
- Hacer fotos o vídeos sin permiso y publicarlo sin consentimiento
- Excluir a las personas de foros o grupos de conversación en línea
Es necesario diferenciar que no todos los conflictos que ocurren en línea entre niños es ciberbullying o acoso cibernético. A veces los niños o adolescentes pueden discutir en las redes sociales pero eso no significa que tenga que ser algo problemático o demasiado dañino. Pueden bromear entre ellos y esto no tiene que ser algo malo realmente. Es necesario determinar si un comportamiento es ciberbullying o no lo es… Si son mensajes hirientes, de forma regular, entonces sí se trata de ciberbullying.
El coberbullying es complicado porque muchas personas pueden ver un vídeo, fotografía y participar en los comentarios. El contenido se puede compartir fácil y rápidamente por muchos usuarios que estén online. El contenido es difícil de eliminar porque se comparte por Internet y se puede grabar y guardar en diferentes lugares. Es difícil para la persona que está siendo acosada escapar si usa esta tecnología con frecuencia.
La víctima, sin tener culpa de nada, se siente culpable de que todo le suceda. No siente esperanza y está dentro de la indefensión aprendida, cree que no puede hacer nada para detener esa pesadilla. El sentimiento de vergüenza y de exclusión son tan grandes que siente depresión y rechazo. También aumentan los sentimientos de inseguridad, temor y miedo en la escuela.
Cómo prevenir el ciberbullying
La mejor manera de prevenir el acoso cibernético es preparar a tu hijo para interactuar en el mundo en línea. Hay algunas cosas que puedes hacer para que tu hijo sepa cómo actuar en cada momento. También deberá ser capaz de explicarte qué está ocurriendo en el mismo instante en que reciba el primer mensaje hiriente. De esta manera, no se sentirá solo en ningún momento y podréis actuar en consecuencia. Hay algunas claves que se deben tener en cuenta:
- Habla con tu hijo sobre qué es el ciberbullying y el perfil de los acosadores.
- Hablad sobre los pasos a seguir si experimenta este tipo de acoso: el primer paso, es decírtelo.
- Enseña a tu hijo habilidades sociales en la vida real para que le ayude también en el mundo virtual.
- Ten siempre las líneas de comunicación abiertas para tu hijo.
- Enséñale sobre respeto y empatía tanto hacia él mismo como hacia los demás.
- Mantén la tecnología fuera de su dormitorio y siempre que lo use deberá ser bajo tu supervisión.
- Deberás saber todas sus contraseñas.
- Enseña normas de seguridad a tu hijo sobre el uso de los dispositivos móviles y las redes sociales.
- La prohibición de las redes sociales no son la solución, ya que igualmente los acosadores pueden crear perfiles falsos que hay que denunciar cuanto antes.
- Habla con los padres del niño agresor y con la escuela, pero si nada de esto funciona es posible que debas involucrar a la policía. Imprime o guarda la evidencia del acoso en caso de que lo necesites para mostrarle a la policía.
Vídeo sobre el ciberbullying
Gracias al canal de Manuel P.T, podemos compartir contigo este trozo de la película «Desconexión» que trata una historia muy dura de ciberbullying con una consecuencia muy dramática pero que puede ocurrir en la realidad. El bullying o el ciberbullying no es cosa de niños, es cosa de todos… Y toda la sociedad debe estar concienciado de su peligro y las terribles consecuencias para ponerle freno cuanto antes.