Antes de ver estos 10 estudios fascinantes sobre la felicidad, te invito a que veas este inspirador vídeo titulado «Justo Antes De Morir De Una Rara Enfermedad Cro?nica, Sam Revelo? Sus Tres Secretos Para La Felicidad».
Sam Berns tenía 17 años cuando dio esta inspiradora conferencia en un evento TED. 3 meses después de esta conferencia, San Berns falleció a causa de la progeria que padecía:
[mashshare]10 estudios fascinantes sobre la felicidad:
- La felicidad activa todo el cuerpo
Al contrario de lo que sucede con los pensamientos, las emociones no residen en la mente, sino que están asociadas a sensaciones en el cuerpo.
Gracias a un nuevo estudio, por primera vez contamos con un mapa que ilustra la relación entre las emociones y las sensaciones en el cuerpo.
Lo que revela el estudio es que la felicidad es la única emoción cuya activación se refleja en todo el cuerpo, incluso en las piernas. Esto podría explicar que las personas felices tengan mayor predisposición para saltar a la acción.
- La felicidad cambia nuestro código genético
La felicidad, además de ser una sensación muy agradable, también beneficia considerablemente nuestro código genético.
Se ha demostrado que las personas que experimentan un nivel mayor de felicidad poseen un sistema inmunitario más saludable. Así, las células responsables de defender el cuerpo contra las enfermedades están presentes en mayor medida en personas que se sienten felices con sus vidas.
- Las personas son más felices cuando ayudan a los demás
Una mayor cohesión social como participar en programas de voluntariado o ayudar a las personas que nos rodean en el día a día nos hace sentir más competentes. Esta sensación de competencia a su vez mejora nuestra autoestima, y consecuentemente nos hace sentir más felices.
- Actuar de forma extrovertida, aunque seas una persona introvertida
Un estudio reciente sugiere que las personas -incluso las que son introvertidas por naturaleza- exponen sentir emociones más positivas en situaciones en las que actúan o se sienten más extrovertidas. Así, actuar de forma extrovertida nos da como un subidón de felicidad.
- La felicidad se contagia online
Las emociones expresadas online (pero también en la vida real) –tanto positivas como negativas- son contagiosas según las conclusiones de un nuevo estudio realizados sobre Facebook. Además, las emociones positivas resultaron ser más contagiosas que las negativas.
- La influencia de la edad en lo que nos produce felicidad
Con la edad, la gente aprende a gozar más de las experiencias sencillas. Es decir, las personas mayores son capaces de disfrutar en mayor medida de las experiencias relativamente ordinarias que las personas más jóvenes. Disfrutan simplemente pasando tiempo con su familia o dando un paseo en el parque por ejemplo. Las personas jóvenes, en cambio, buscan experiencias más extraordinarias o estimulantes.
- Las personas materialistas son menos felices
La razón por la que las personas materialistas son menos felices es porque se centran en lo que quieren y que no tienen, lo que hace todavía más difícil apreciar lo que ya se tiene. Además, un estudio reciente muestra que las personas materialistas también sienten menos gratitud, lo que a su vez, está asociado con un nivel de satisfacción menor.
- El poder de las conexiones sociales
Las interacciones sociales positivas están más altamente relacionadas con la felicidad que los logros académicos, según un estudio.
Mientras que las relaciones sociales en la infancia y la adolescencia con nuestra familia de origen determinan en gran medida la felicidad en la edad adulta, la influencia de los logros académicos es mucho menos significativa.
- Las metas que nos llevan a la felicidad
Sorprendentemente, la gente está a menudo equivocada sobre el tipo de metas que creen les va a procurar más felicidad.
Se ha demostrado que tener metas concretas para la felicidad funciona mejor que tener metas abstractas.
El estudio revela que intentar sacarle una sonrisa a alguien por ejemplo hace que la persona que lo hace se sienta más feliz que si se propusiera hacer feliz a alguien.
Así, pensar en nuestros objetivos en términos concretos puede minimizar el intervalo entre nuestras expectativas y lo que realmente es posible.
10. Placeres inesperados de la vida cotidiana
Las experiencias mundanas de la vida cotidiana nos pueden proveer de una alegría inesperada. Tendemos a subestimar la felicidad que podemos obtener de los momentos aparentemente simples del día a día.
por Jasmine Murga